viernes, 28 de diciembre de 2007

Ecoaula.es: Convertirse en auditor por un día

Convertirse en auditor por un día:
nuevos acuerdos con las universidades

En España existen más de 18.700 auditores y un total de 1.230 firmas de auditoría.
Por Chus Muñoz | 6:00 - 28/11/2007

Para acercarles la realidad que se cuece en el que hacer diario de estos profesionales, los censores de cuentas madrileños han puesto de acuerdo a universidades y firmas auditoras para, de una manera práctica, permitir a los estudiantes descifrar los entresijos que se esconden tras el trabajo de quienes hacen cumplir las reglas contables.

Desconocida, pero con prestigio
Una de las profesiones más demandadas en el sector financiero es la de auditor. Muchos son los universitarios que con su recién conseguido título de licenciado en el bolsillo aspiran a integrarse en una firma de auditoría, un oficio que tradicionalmente se ha nutrido de los mejores expedientes académicos de las carreras de la rama de Económicas.

Ser auditor tiene un halo de prestigio entre estos jóvenes, aunque no todos tienen muy claro cuál es su función dentro de las empresas ni qué papel desempeñan en la sociedad.

Para despejar dudas, desmitificar una profesión maltratada por algunos sectores y acercar la realidad de la auditoría al mundo de la universidad, la Agrupación de Madrid del Instituto de Censores Jurados de Cuentas (ICJCE) organizó una jornada denominada Auditor por un Día en la que 35 alumnos de seis universidades madrileñas (Complutense, Autónoma de Madrid, Carlos III, San Pablo CEU, Universidad de Alcalá de Henares y Pontificia de Comillas) trabajaron durante una jornada completa en una de las ocho firmas de auditoría participantes en esta iniciativa (BDO, Audalia, Auren, Deloitte, Ernst & Young, KPMG, Laes Nexia y PricewaterhouseCoopers), junto con el equipo encargado de llevar a cabo la auditoría real de una empresa real.

Acercar la profesión
Antonio Fornieles es el presidente de la Agrupación de Madrid del ICJCE y uno de los principales responsables de esta experiencia, "que englobamos dentro de un programa más amplio denominado Universidad-Auditoría en el que nuestro objetivo es acercar esta profesión a los estudiantes y transmitirles mejor los conocimientos que engloba nuestro sector".

Para poner en marcha esta iniciativa, los censores de cuentas de Madrid contaron con el apoyo de varias firmas de auditorías, "cuyos responsables de Recursos Humanos estuvieron encantados de participar en este proyecto y acoger a varios universitarios para enseñarles in situ como es el día a día de un auditor".

Y para comprobarlo, nada mejor que meterse en la piel de un trabajador de estas firmas y hacer lo que ellos hacen todos los días: dotar de transparencia a las cuentas empresariales para que todas las compañías cumplan las reglas contables del mercado.

"Por que una cosa es la teoría -apunta el presidente de los auditores madrileños- y otra la realidad. Cuando explicas a un estudiante la metodología de nuestro trabajo desde la práctica, entienden el interés público que tiene esta profesión".

Un oficio de interés social
Laura Chacón, estudiante de cuarto curso de Administración y Dirección de Empresas de la Universidad de Alcalá de Henares y participante en la jornada Auditor por un Día en Audalia, parece que sí lo ha entendido. "Gracias a esta experiencia he descubierto que un auditor no es un personaje gris que se pasa el día desgranando cuentas, sino que trabaja en equipo y con mucho contacto con el personal de la compañía, aprendiendo siempre cosas nuevas".

Preguntada si ella le ve el interés social por alguna parte al oficio de auditor, su respuesta es clara. "Por supuesto. Mucha gente cree que el auditor es el que viene a fastidiar a la empresa, pero nada más lejos de la realidad. Su único deber es dejar las cosas claras en la contabilidad. Hacer que nadie se salte las reglas".

Laura ha elegido la especialidad de auditoría en su carrera, así que parece tener claro hacia dónde se dirige su vida laboral. "Esta experiencia me ha animado a esforzarme más en mis estudios para poder conseguir mi meta cuanto antes".

Descubrir al auditor real
Otro participante no era tan rotundo en sus aspiraciones laborales antes de conocer de verdad el mundo de la auditoría. Javier Lliso, 20 años y estudiante de segundo curso de ADE en San Pablo CEU, sólo sabía de qué se trataba esto de oídas, "porque tengo un hermano que trabaja en una auditoría, aunque nunca me había planteado muy en serio entrar en este sector.

Ahora, tras conocerlo más a fondo, me lo pienso en mayor medida". La firma que le acogió fue Deloitte. "La profesora de Contabilidad de la facultad nos comentó en clase la idea, y cuatro compañeros nos apuntamos. La verdad es que ha sido una experiencia formidable y sin duda volvería a repetirla". De lo mejor que se ha llevado, "el cómo se fomenta el trabajo en equipo".

La persona que se ha encargado de coordinar esta colaboración entre las universidades madrileñas, las compañías auditoras y el instituto que agrupa a los censores de cuentas de la capital es Begoña Navallas, auditora y profesora de Contabilidad en ADE y la doble licenciatura de Derecho y Administración de Empresas de la Universidad Autónoma de Madrid.

Transmitir la experiencia
"La experiencia no ha sido para reclutar personal para las firmas de auditoría -señala- sino para ayudar a los estudiantes en su orientación laboral". Como buena conocedora de todas las partes que han confluido en esta iniciativa, indica que todo el mundo ha salido satisfecho de la misma, "tanto los estudiantes, porque más de uno me ha dicho que se está pensando seriamente dedicarse a esta profesión, como las firmas de auditorías, que han quedado muy contentas con la participación de los jóvenes en su trabajo".

Respeto al perfil de alumnos que solicitaban las firmas auditoras, "todas querían estudiantes procedentes tanto de la universidad pública como de la privada -señala Begoña Navallas-, en ningún caso se han decantado más por unos u otros".

El colofón de esta iniciativa -que promete repetirse en breve- se está llevando a cabo en estos días. Desde el pasado lunes y hasta el próximo viernes 30 de noviembre, todos los estudiantes que han formado parte de ella están relatando en sus respectivas facultades a sus compañeros de clase las impresiones recibidas durante la jornada en que se convirtieron en auditores reales. "Claro que en estos días los jóvenes no están solos -indica Antonio Fornieles-.

Ellos cuentan cómo les ha ido en las empresas, aunque un profesional de la auditoría les acompaña para poder resolver posibles preguntas del resto de los alumnos".

No hay comentarios: