BetisWeb.com: El déficit del Betis sería de 20 millones con PGC 1990

EL DÉFICIT DEL BETIS ASCENDERÍA A 20 MILLONES CON LA NORMATIVA CONTABLE VIGENTE HASTA EL AñO PASADO
El Betis, sin cometer ilegalidad alguna, ha aprovechado la adaptación a las nuevas normas contables, que han entrado en vigor este ejercicio, para «maquillar» el enorme déficit que resulta a 30 de junio de 2009 y que se evaluará este miércoles en la Junta General de Accionistas.
28/12/2009

La entrada en vigor del Nuevo Plan General de Contabilidad, por adaptación de las normas contables a las directivas europeas, ha hecho que el club pueda acogerse a la Disposición Transitoria 4ª del R. D. 1514/07, donde se aprueba el citado plan según se recoge en el segundo apartado del Informe de Auditoría que la entidad ha puesto a disposición de sus accionistas. Los responsables financieros béticos han imputado directamente a Reservas gastos de otros ejercicios, que serán presentados en la Asamblea como «Corrección de errores», según se desprende del apartado 2g) de la Memoria, y que de acuerdo con la antigua normativa serían Pérdidas del ejercicio antes de aplicarse a Reservas. Por ello, los 8,4 millones de euros de pérdidas reconocidas por la entidad se quedan cortos a ojos de la normativa de los años anteriores, ya que con la «Corrección de errores», éstas habrían alcanzado los 20 millones, según se puede leer hoy en las páginas de deportes de ABC de Sevilla.

Lo ejecutado por los responsables financieros del club, cuya cabeza visible es Ángel Martín, que será ratificado en la Asamblea en su nuevo cargo de adjunto a la presidencia, sólo está contemplado el primer año de la entrada en vigor de la nueva normativa, pero el subterfugio utilizado reside en que fue incluido como «Corrección de errores» cuando debió aparecer en el apartado 20 de la Memoria («Aspectos derivados de la transición a las nuevas normas contables») cuantificando el impacto que producen dichos «errores» sobre el Patrimonio Neto. De hecho, en este último apartado sólo se reconocen 57.213,81 euros de efecto neto y no los 7.351.234,54 euros de gastos netos que se han aplicado directamente a Reservas y que reducen el Patrimonio Neto de la entidad en la citada cantidad.

De esta manera, la incidencia en las cuentas anuales que presentará el Betis es doble: por un lado, sobre el Resultado del Ejercicio, que antes de impuestos es negativo en 13.428.679,68 euros, pero ya se ha explicado que el club aplica el crédito fiscal (que dependerá de la capacidad de la entidad para generar beneficios futuros, algo poco probable en la situación actual y con antecedentes de pérdidas) que reduce las Pérdidas en 4.946.177,24 euros, dejando el resultado contable en 8.482.502,44 euros. Si se le añaden los 7.351.234,54 euros de gastos que se ha aplicado directamente a Reservas, las pérdidas reales del ejercicio llegarían a una cifra realmente estratosférica de 20.779.914,22 euros.

Encadesa y Tegasa
¿De dónde salen estos 7,3 millones de «Corrección de errores» que tendrían que haber ido a Pérdidas directamente antes de aplicarse a reducir las Reservas? Pues la documentación a la que pueden tener acceso los accionistas béticos lo explica perfectamente. Como Gastos: 8.6 millones de la liquidación del contrato con Encadesa (devolución de los derechos urbanísticos); 934.198,45 de facturas de Tegasa por derechos de imagen de jugadores por pagos a cuenta de IRPF; 594.723,03 de liquidación de jugadores; 911.393,49 de facturas de Tegasa por derechos de imagen de jugadores y 175.506,12 de otros gastos. Mientras que como Ingresos aparecen 450.000 de mayor importe de liquidación del contrato de prestación de servicios con Encadesa; 164.412.52 de otros ingresos; 3.180.422,57 de crédito fiscal por los resultados imputables a ejercicios anteriores de la presente corrección de errores y 69.751,46 de amortización acumulada de elementos de inmovilizado material que debieron darse de baja por obsolescencia en el ejercicio anterior.

Por otro lado, el efecto negativo en los Fondos Propios de la entidad. Aplicándose directamente a Reservas, estas cantidades no pasan por la cuenta de resultados gracias a la transición a la nueva normativa, pero con la salvedad de que sean gastos de ejercicios anteriores, algo que es ciertamente discutible. Así, las Reservas a primero de julio de 2008 alcanzaban los 38.556.783,46 euros pero al restarle los ajustes de la aplicación del nuevo Plan General de Contabilidad (7.351.234,54) éstas disminuyen hasta los 31.205.548,92 euros y aún hay que detraerles 57.213,81 de las diferencias positivas de cambio en la transición a la nueva normativa, lo que deja un balance de reservas de 31.262.762,73 euros. Todo ello hace que en el ejercicio que se cierra el club se haya descapitalizado considerablemente, ya que los Fondos Propios han disminuido a poco más de 20 millones de euros, frente a los 36 del ejercicio anterior, según la composición del Pasivo que se presentará a la Asamblea.

Auditoría benevolente
De un estudio más pormenorizado de la Memoria se desprende cierta benevolencia de la empresa que ha realizado el preceptivo estudio de las cuentas béticas, Garrido Auditores S L. Aunque no resulte incompatible, otras sociedades de la marca Garrido han prestado servicios al club en áreas jurídicas, ya que se han encargado de la defensa del Betis ante la inspección de Hacienda, recibiendo unos honorarios que ascienden a 124.854,68 euros, aparte del importe de la auditoría. Y esta supuesta benevolencia puede comprobarse en el apartado «Hechos posteriores al cierre» cuando tras exponer «circunstancias causantes de duda sobre la aplicación del principio de empresa en funcionamiento» recoge resultados económicos negativos y cash-flow negativo en los dos últimos ejercicios, fondo de maniobra negativo y de cuantía significativa, descenso a Segunda y reducción de los ingresos televisivos, y contra estas causa aplica como «factores mitigantes suficientes de dicha duda», es decir, las medidas que la sociedad va a adoptar para corregir esta tendencia negativa, estrategias tan peregrinas como apoyo financiero de los accionistas, capacidad de renovación o retraso de los vencimientos de los préstamos existentes y posibilidad de acuerdo de reestructuración de las deudas, la posibilidad de venta de futbolistas y la reducción de gastos por el descenso. Es decir, la duda sobre la continuidad de la empresa reside en hechos concretos y consumados y la estrategia a seguir para corregirla es, simplemente, un brindis al sol.

Presupuesto difícil de cumplir
En el Presupuesto para la temporada 2009-10, ya en curso, y que aparece al final de la documentación presentada al accionista bético también hay cifras de difícil asimilación. En la propuesta de Gastos se prevé pagar 18.865.600 euros en salarios a los jugadores, un guarismo sensiblemente inferior al del ejercicio anterior, cuando se superaron los 30 millones y sólo ha habido tres bajas realmente significativas en sueldos (Edu, Oliveira y Mark González), mientras que ha habido altas también señaladas en este concepto (Carlos García, Nacho, Iriney y renovación de Arzu). De la misma manera, en la propuesta de Ingresos hay cifras llamativas, ya que se esperan 300.000 euros por partidos de la Copa (el equipo fue eliminado en la primera ronda con una pobre entrada), casi 2,5 millones en trofeos de comercialización (?), 9,3 millones por ingresos de abonados (en el anterior ejercicio se reconocen casi once con 39.000 socios), 6,3 de derechos de retransmisión (el contrato con Mediapro rozó los tres) y hasta 14 millones por traspasos (ya estarían contabilizados Oliveira y Mark, pero faltarían más). Y todo para cuadrar los 37,7 millones de presupuesto.