lunes, 28 de julio de 2008

ExpansiónyEmpleo.com: La alternativa, ser autónomo (minusválidos)

La alternativa, ser autónomo
La contratación de un trabajador por cuenta propia con discapacidad es una fórmula poco conocida por parte de las empresas para cumplir la Ley de Integración Social de los Minusválidos. Ramón García, autónomo discapacitado, explica la labor de su colectivo.
Beatriz Elías / Madrid.

Son los grandes desconocidos. Así define Ramón García (Padrón, A Coruña, 1966), autónomo y discapacitado visual, el colectivo al que pertenece. García es gerente de Integralia, una empresa de consultoría logística y outsourcing de compras que nació en noviembre de 2006. De acuerdo con la Ley de Integración Social de los Minusválidos (Lismi), en una empresa que tenga más de cincuenta trabajadores fijos, al menos el dos por ciento deberían ser personas con algún tipo de minusvalía. No obstante, de forma excepcional, las empresas podrán quedar exentas de esta obligación, siempre y cuando cumplan alguna de las medidas alternativas que se recogen en el Real Decreto 364/2005 de 8 de abril.

Varias de estas opciones hacen referencia a la contratación de autónomos con discapacidad, como la celebración de un contrato mercantil o civil con un Centro Especial de Empleo (CEE) o con un trabajador autónomo con discapacidad para el suministro de materias primas, maquinaria, etcétera; y la celebración de un contrato mercantil o civil con un CEE o con un trabajador autónomo con discapacidad para la prestación de servicios ajenos y accesorios a la actividad normal de la empresa. De este modo, para cumplir la ley una compañía se puede servir de los emprendedores discapacitados. Pero, como explica García, "los empresarios no nos conocen, porque somos muy pocos, por eso somos los grandes desconocidos. Pero las empresas se pueden aprovechar mucho de los autónomos con discapacidad, porque los márgenes de negocio con los que trabajamos son más pequeños". Así, "si una empresa contrata a un emprendedor discapacitado, cumple la ley mediante la facturación con la persona que están contratando. Los empresarios tienen en nosotros un gran filón para cumplir la norma", expone el autónomo.

De hecho, según este emprendedor, los empresarios están demandando cada vez más un listado de autónomos discapacitados, ya que actualmente no existe ningún registro específico de empresarios autónomos discapacitados que podría facilitar el contacto para las compañías que estén interesadas en realizar contratos civiles o mercantiles con autónomos discapacitados para la prestación de servicios para que cumplan con la legislación.

En proyecto
Por esto García, junto con otros autónomos con discapacidad, quiere poner en marcha una web para darse a conocer (ahora se puede obtener información en info.integralia@yahoo.es). Así, con esta herramienta los empresarios podrán acceder a un listado de emprendedores con algún tipo de minusvalía y conocer los servicios que ofrecen para contratarles y cumplir la ley mediante esta alternativa. El gerente de Integralia estima que la página web estará operativa en octubre.

Además de este proyecto, García ha llevado a cabo otras acciones para darse a conocer: "Hemos enviado cartas a empresas que ya conocía y que podrían necesitar los servicios que ofrece Integralia, y la fórmula del boca a oreja es muy efectiva". Y es que el gerente de Integralia cuenta con una larga trayectoria profesional. Diplomado en Empresariales y en Dirección y Gestión de Empresas, García trabajó en la Fundación Once. Luego se trasladó a Londres, y a su regreso a España en 2006 montó su negocio y así nació Integralia. "La empresa comenzó como consultora logística, pero observando las demandas de nuestros clientes y lo que estos nos pedían ampliamos el negocio al outsourcing de compras", explica el emprendedor. Además, la manera de trabajar en Integralia es peculiar: "Cuando detectamos al trabajar con una empresa que no podemos prestar determinados servicios, nos ponemos en contacto con otros autónomos con discapacidad que sí los ofrecen. Así colaboramos con otros discapacitados. El objeto social de la empresa es la integración social y laboral de personas con discapacidad", explica el gerente de Integralia.

Desde su nacimiento, Integralia ha cumplido "sobradamente" las expectativas. En 2007 y en España, "el 20% de la facturación ha sido de empresas que tenían que cumplir la ley, como grandes consultoras, laboratorios farmacéuticos y empresas de transporte", destaca García.

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