Los expertos contrastan informes periciales de la actuación de AVAUno de ellos afirma que Ernst & Young evitó la intervención de la CNMV.Algunos testigos dicen que los contratos con los clientes daban a estos "plena libertad".
elPeriódicodeAragón.com 02.04.2008
La segunda jornada sobre el juicio parcial de la agencia de valores AVA, celebrada ayer en la Audiencia Provincial de Zaragoza, estuvo presidida por la exposición de los informes periciales de los peritos. La vista fue densa, llena de argumentos relacionados con la suspensión de pagos, solicitada en 1998 y con la actuación previa del auditor Erns & Young.
En este escenario, las incógnitas por despejar eran si las cuentas indicaban realmente el estado y situación de la agencia de valores, y si los afectados conocían los riesgos que entrañaban esas inversiones.
A un lado de la sala, el Ministerio Fiscal y el abogado de la acusación particular. Al otro, los abogados de la defensa. En el centro, el presidente del Tribunal, Julio Arenere, que no concedía una sola licencia y se mostraba implacable. El exconsejero delegado de AVA, Enrique Coronado; tres miembros del consejo de administración, Juan José Camacho, Pilar Barrio y Gonzalo Marqués; y el auditor de Erns & Young, Felipe Herranz, escuchaban desde el banquillo de los acusados un delito societario y de insolvencia punible.
El perito Gerardo Ortega, a petición del Ministerio Fiscal, declaró que los clientes de AVA no conocían el riesgo de las operaciones que realizaba la firma a través del Socimer Bank Limited, en Bahamas. Además, añadió que "si el auditor hubiera reflejado lo que tenía que haber reflejado, la CNMV hubiera actuado" antes de la suspensión de pagos. Y añadió: "el auditor estaba obligado a incluir estas irregularidades", ya que las operaciones "no se ajustaban a los contratos con los clientes". Además, recordó que el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) sancionó a Ernst & Young por posible perjuicios graves a terceros.
También comparecieron como testigos y peritos Teófilo Valero, José Ignacio Ruiz del Olmo y Miguel Angel Hernández. Ruiz del Olmo remarcó que los directivos de AVA actuaban por cuenta de los clientes "y no por cuenta propia" y afirmó que la contabilidad de la agencia de valores reflejaba "fielmente" su actividad. El economista Jesús Solchaga afirmó que el contrato de AVA con sus clientes daba a estos "plena libertad". Y concretó que los directivos de AVA actuaban por cuenta de clientes. La sesión estuvo salpicada por los testimonios de varios afectados que llegaron a invertir hasta diez millones de las antiguas pesetas.
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